lunes, 31 de octubre de 2011

Castañas

Madre mía ayer fui a por castañas y coji unas seis o siete no mas, menos mal que estaban los otros, menos Ana que se dedico a las fotos como yo! En sito era bastante chulo pero nos cansamos rapido, es lo que tiene la juventud de hoy en dia! Luego fuimos a mi casa a asarlas en una chasca, la cual he tenido que recoger hoy a las 9:30 ¬¬ pero no importa porque nos lo pasmos bastante bien ^^

domingo, 30 de octubre de 2011

A por castañas

Esta tarde vamos a por castañas ya os contare que tal nos ha ido, pero yo creo que bastante bien! Y despues vamos a mi casa a asarlas en una hoguera :)  Hasta luego amigos!

sábado, 22 de octubre de 2011

Hola AnaM Hola Judith

Espero que veáis esta entrada algun día.
Solamente queria deciros que sois un pelin pesadas y que mis llaves no pueden abrir porque estan "cachondas"
solamente eso!

domingo, 16 de octubre de 2011

El amor es ciego...

... y por eso se mete ostias.
Solamente pido verte al despertar.
Solamente pido acariciarte en la noche.
Solamente pido cenar tus labios.
Solamente pido perderme en tus caderas.
Solamente pido tocar el cielo contigo.
Solamente pido que me susurres al oído.

Solamente pido estar contigo.

sábado, 15 de octubre de 2011

Mi favorito #2


Verde que te quiero verde.
Verde viento. Verdes ramas.
El barco sobre la mar
y el caballo en la montaña.
Con la sombra en la cintura
ella sueña en su baranda,
verde carne, pelo verde,
con ojos de fría plata.
Verde que te quiero verde.
Bajo la luna gitana,
las cosas la están mirando
y ella no puede mirarlas.

Verde que te quiero verde.
Grandes estrellas de escarcha,
vienen con el pez de sombra
que abre el camino del alba.
La higuera frota su viento
con la lija de sus ramas,
y el monte, gato garduño,
eriza sus pitas agrias.
¿Pero quién vendrá? ¿Y por dónde?
Ella sigue en su baranda,
verde carne, pelo verde,
soñando en la mar amarga.

--Compadre, quiero cambiar
mi caballo por su casa,
mi montura por su espejo,
mi cuchillo por su manta.
Compadre, vengo sangrando,
desde los puertos de Cabra.
--Si yo pudiera, mocito,
este trato se cerraba.
Pero yo ya no soy yo,
ni mi casa es ya mi casa.
--Compadre, quiero morir,
decentemente en mi cama.
De acero, si puede ser,
con las sábanas de holanda.
¿No ves la herida que tengo
desde el pecho a la garganta?
--Trescientas rosas morenas
lleva tu pechera blanca.
Tu sangre rezuma y huele
alrededor de tu faja.
Pero yo ya no soy yo,
ni mi casa es ya mi casa.
--Dejadme subir al menos
hasta las altas barandas,
¡dejadme subir!, dejadme
hasta las verdes barandas.
Barandales de la luna
por donde retumba el agua.

Ya suben los dos compadres
hacia las altas barandas.
Dejando un rastro de sangre.
Dejando un rastro de lágrimas.
Temblaban en los tejados
farolillos de hojalata.
Mil panderos de cristal
herían la madrugada.

Verde que te quiero verde,
verde viento, verdes ramas.
Los dos compadres subieron.
El largo viento dejaba
en la boca un raro gusto
de hiel, de menta y de albahaca.
--¡Compadre! ¿Dónde está, dime?
¿Dónde está tu niña amarga?
¡Cuántas veces te esperó!
¡Cuántas veces te esperara,
cara fresca, negro pelo,
en esta verde baranda!

Sobre el rostro del aljibe
se mecía la gitana.
Verde carne, pelo verde,
con ojos de fría plata.
Un carámbano de luna
la sostiene sobre el agua.
La noche se puso íntima
como una pequeña plaza.
Guardias civiles borrachos
en la puerta golpeaban.
Verde que te quiero verde,
verde viento, verdes ramas.
El barco sobre la mar.
Y el caballo en la montaña.

De este poema ya hice una entrada un poco más abajo.

Uno de mis favoritos


Caminante, son tus huellas
el camino y nada más;
Caminante, no hay camino,
se hace camino al andar.
Al andar se hace el camino,
y al volver la vista atrás
se ve la senda que nunca
se ha de volver a pisar.
Caminante no hay camino
sino estelas en la mar.

Triste realidad


Prometo no mandar más cartas y no pasar por aquí
Prometo no llamarte más y ni inventar ni mentir
Prometo no seguir viviendo así, prometo no pensar en tí
Prometo dedicarme solamente a mí.

Prometo que a partir de ahora lucharé por cambiar
Prometo que no me verás, que no voy a molestar
Sabes que lo digo de verdad, que no voy a fallarte en nada
Que tengo mucha fuerza de voluntad, que no te fallaré en nada
Prometo no seguir así, prometo que no voy a pensar en ti
Prometo dedicarme solamente a mí.

Y el aire que me sobre alrededor
Y el tiempo que se quede en nada
Nunca más escucharé tu voz
Energía nunca liberada
Promesas que se perderán en estas cuatro paredes
Como lágrimas en la lluvia se irán.

Siento que no tengo sueño y no puedo descansar
Invento más de mil palabras y busco una verdad
Intento que suenen de forma genial
Intento que no digan nada
Nada siempre es toda la verdad
Nada significa nada
Prometo las promesas que me hice a mí
Prometo pensar en tí
Ahora prometo solo pensar en tí.

Y hago que suenen de forma genial
Prometo que no dicen nada
Nada siempre es toda la verdad
Nada significa nada
Palabras que no dicen nada en estas cuatro paredes
Promesas que no valen nada, nada, nada, nada.

Y el aire que me sobre alrededor
Y el tiempo que se quede en nada
Nunca más escucharé tu voz
Energía nunca liberada
Promesas que se perderán en estas cuatro paredes
Como lágrimas en la lluvía se irán.

Cuento para Coral


Todo fue un sueño, no era verano, era invierno, y aun quedan 2 horas para tener que levantarse, así que se concentro en el anterior sueño, con el deseo de soñar que si era verano.  En su sueño podía verse un pueblo del sur de España, un pueblo con un castillo, y con unas personas maravillosas, personas que siempre sonreían, y se divertían en una piscina y en un campanario. Algunas veces discutían, pero siempre se terminaba arreglando, en el grupo había una que era imprescindible, Coral, una joven muy alegre y con mucho sentido del humor, y rápido se hizo amiga de un chico que acababa de llegar, y que destacaba por su altura, Miguel.
Paso el tiempo y ese grupo de amigos se amplió un poco y se consolido, la fuerza que unía a ese grupo era inmensa, aunque algunos se fueron, la amistad entre estos amigos fue creciendo rápidamente, y terminaron cogiéndose un gran cariño. Pero al final del verano Miguel le confeso una cosa a su amiga:
-Seguramente el verano que viene no esté aquí.
-¿Por qué?
-Porque seguramente me vaya a estudiar fuera…
-No quiero pasar el próximo verano sin ti.
Miguel la sonrió y se alejo poco a poco, desapareciendo en una niebla que surgió de repente. Sonó el despertador y Coral se levanto y rápidamente fue a mirar el calendario, y lo miro con ilusión porque en unos poco días iba a ver a su amigo Miguel.

sábado, 8 de octubre de 2011

Y la muerte solo es una puta que cobra por horas

-Puede que solo le queden unas horas de vida
-No quiero verlo en ese estado
-Deberías hacerlo, ahora mismo eres la persona que mas feliz le haces
Se giro hacia la puerta agarro el pomo y entro, allí encontró al hombre que le  había hecho pasar tan buenos momentos, sobre una cama y sin fuerzas para levantarse. le agarro la meno y le miro a los ojos, unos ojos que deseaban el final, que no aguantaban ese dolor, pero justo al fondo estaba ese brillo que siempre le había caracterizado y saco fuerza de sus entrañas para apretar la mano y que ella supiese que la quería con locura, cuando aflojo la mano sus ojos se cerraron y nunca mas tomo el aire que todos respiramos.